El territorio Atlántico de Portugal (al igual que las Islas Canarias de España) experimenta un clima muy placentero durante todo el año, hasta el punto de convertirse la Isla de Madeira en uno de los destinos de escapadas invernales favoritos de los europeos.
Madeira es un sitio muy variopinto que no desaprovecha nada de sus recursos naturales o humanos: paisajes pintorescos de escarpadas montañas verdes, suaves y tranquilos valles, terrazas con viñedos y jardines encantadores.
Esta isla volcánica ofrece unas vistas impresionantes para todos los amantes del senderismo y montañismo con lagos formados en antiguos cráteres, cuevas, senderos de montaña y vías que se abren paso en los bosques de arbustos.
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Las caminatas por las “Levadas” (canales abiertos de riego) son una manera perfecta para ver los fantásticos lugares de interés natural que Madeira ofrece. Muchos de estas levadas están cortadas por el Bosque de Laurisilva (selva húmeda tropical de montaña)más grande de su tipo en el mundo. Este bosque, que fue proclamado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1999 dada la variedad de especies raras y endémicas de fauna y flora.
La temperatura del agua del mar en Madeira es muy agradable durante todo el año con la ayuda de la influencia de la corriente del Golfo. Así, las costas de Madeira son visitadas por numerosas especies de ballenas, delfines y tortugas. No es de extrañar que la isla de Madeira haya adquirido apodos tales como la Perla del Atlántico o en el Jardín Flotante del Edén.
La primera vez que visitas Madeira te vas a quedar sin habla por la abrumadora belleza de la isla. Al llegar a Funchal desde el aeropuerto, puedes darte cuenta de lo espectacular que se ve la ciudad rodeada de montañas, el mar azul, los verdes valles, la impresionante bahía e incluso lo bien cuidado que están los jardines de las casas particulares.
Funchal, ciudad azul y verde
Funchal recibe su nombre de la planta de hinojo Funcho que crecía en abundancia en la zona cuando el explorador portugués, João Gonçalves Zarco piso la isla en 1420.
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Funchal, considerado como una de las ciudades más limpias de Europa. La arquitectura local se entreteje entre los modernos edificios y algunos con mas de 500 años de historia. Además de todos los acontecimientos culturales que tienen lugar durante el año, en Funchal puedes visitar numerosos museos, jardines y lugares de interés.
Funchal se divide en tres partes principales: la zona del Lido, donde se encuentra la mayoría de 4 y 5 estrellas; el centro de la ciudad, donde se encuentran la mayoría de las tiendas y locales de ocio, y el casco antiguo, donde puedes ver las casas restauradas en calles empedradas y una buena cantidad de restaurantes de especialidades locales.
Que hacer en Funchal
Paseo a la orilla de la playa: Un paseo absolutamente encantador es el que puedes dar por la zona de la piscina pública de Lido hasta llegar a Praia (playa) Formosa. El recorrido es de 3 kilómetros de largo a lo largo de un camino justo a la orilla del mar. A lo largo del recorrido hay un montón de bares y restaurantes con terrazas que te permiten disfrutar de un paisaje increíble.
Parque de Santa Catarina: este parque público es una visita obligada para cualquier persona que recorre Funchal a pie. Este hermoso parque posee gran variedad de plantas autóctonas, un aviario con aves exóticas y un pequeño lago con cisnes negro, una estatua de Colón y una capilla que se ordenó construir en 1425 por Constanza de Almeida, la esposa de João Gonçalves Zarco.
Madeira Wine Company: Entre el Parque Municipal y el Centro oficial de información se encuentran las bodegas de Vino más antiguas de Madeira, también conocidas como el Museo del Vino Blandy. En una visita de una hora alrededor de las bodegas, se puede admirar las cartas, documentos, libros, objetos y maquinaria de varios siglos de antigüedad. También hay un video sobre la historia del vino de Madeira y, obviamente, la oportunidad de degustar y comprar vinos.
Mirad este vídeo y contemplad las maravillas que esta isla ofrece durante todo el año:
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